12 seńales de cirrosis hepatica que no deberías ignorar

1. Cansancio extremo y persistente

Sentirse agotado todo el tiempo, incluso después de dormir bien, puede ser una señal de que tu hígado está teniendo dificultades para filtrar las toxinas del cuerpo. Esta fatiga continua suele ser una de las primeras señales de cirrosis hepática.
2. Pérdida del apetito

Cuando el hígado no funciona bien, puede afectar el sistema digestivo. Si notas que has perdido el interés por comer, o te olvidas de las comidas, podría ser una alerta temprana.
3. Pérdida de peso inexplicable

Bajar de peso sin proponértelo parece positivo, pero si no estás haciendo dieta ni ejercicios y estás perdiendo peso rápidamente, puede indicar un trastorno hepático serio.
4. Náuseas o molestias digestivas

Una mala digestión frecuente, hinchazón después de comer, o náuseas constantes pueden ser provocadas por un hígado que no logra procesar las grasas correctamente.
5. Color amarillento en la piel o los ojos (ictericia)

La ictericia es una de las señales más evidentes de problemas hepáticos. Se produce cuando hay un exceso de bilirrubina en el cuerpo, ya que el hígado no logra eliminarla adecuadamente.
6. Abdomen hinchado o inflamado (ascitis)