lire la suite en page suivanteEl estrés es un compañero común en la vida de un rockero, desde los ensayos hasta las preocupaciones de la vida diaria. Si sientes que estás al borde del colapso, es mejor no saltar a la ducha de inmediato. El agua caliente puede ser relajante, sí, pero si estás en un estado elevado de estrés, podrías experimentar mareos o cambios repentinos en tu presión arterial. Tómate un tiempo, respira profundamente y, cuando te sientas más centrado, entonces es el momento perfecto para darse la ducha que tanto mereces.En la cultura rockera, la higiene a menudo se toma como una broma, pero es vital recordar que cuidar de nosotros mismos también es parte de ser un verdadero amante del rock. Evitar ducharnos en esos momentos críticos puede ser la clave para mantener nuestro cuerpo y mente en equilibrio. Así que la próxima vez que sientas la urgencia de limpiarte después de una noche intensa, recuerda estos consejos y aplícalos. La vida rockera no tiene por qué ser inconsistente; simplemente elige el momento adecuado para darte esa refrescante ducha.
