A medida que envejecemos, nuestro cuerpo experimenta cambios que pueden afectar la absorción de nutrientes esenciales. Por eso, una alimentación equilibrada, junto con suplementos adecuados cuando es necesario, puede marcar una gran diferencia en la calidad de vida de los adultos mayores. A continuación, te compartimos las 4 vitaminas clave que no deberían faltar en la rutina diaria de quienes han superado los 60 años.
1. Vitamina D – Para huesos fuertes y defensa inmune
La vitamina D es vital para la absorción del calcio, lo cual ayuda a prevenir la pérdida ósea, la osteoporosis y las fracturas. Además, fortalece el sistema inmunológico y podría reducir el riesgo de infecciones respiratorias.
¿Por qué es esencial en adultos mayores?
Con la edad, la piel pierde la capacidad de sintetizar vitamina D al exponerse al sol. Además, muchas personas mayores pasan menos tiempo al aire libre.
¿Dónde se encuentra?
Luz solar (15 a 30 minutos diarios)
Pescados grasos (salmón, sardinas)
Yemas de huevo
Leche fortificada
Suplementación recomendada: Consulta médica para ajustar dosis, aunque comúnmente se recomienda entre 800 y 2000 UI diarias.
