El malestar aumenta después de la actividad física o al final del día.
Prevención y mantenimiento
Las venas moradas pueden ser una señal de alerta de una afección médica subyacente. Si persisten o se acompañan de dolor, inflamación u otros síntomas, es importante consultar a un médico. Mientras tanto, los siguientes cambios en el estilo de vida pueden ayudar:
Mantener un peso saludable – Reducir la tensión en las venas.
Ejercicio regular: La actividad física mejora la circulación y fortalece los músculos de las piernas. Intente realizar al menos 30 minutos de actividad al día.
