Uso tópico (externo):
Aplique una pequeña cantidad del aceite sobre las piernas afectadas por várices, masajeando suavemente de abajo hacia arriba para estimular la circulación. Hágalo cada noche antes de dormir.
Uso oral (opcional y moderado):
Puede consumir 1 cucharadita en ayunas tres veces por semana para reforzar los efectos antiinflamatorios y circulatorios.
Duración del tratamiento:
Se recomienda aplicar este remedio durante 4 a 6 semanas consecutivas, descansar una semana y repetir si es necesario.
Otros remedios con ajo y clavos de olor
Infusión para la circulación y la digestión
Hierva 1 taza de agua con 2 clavos de olor.
Añada medio diente de ajo machacado.
Deje reposar 5 minutos y beba tibio una vez al día.
Macerado en vinagre para várices y hongos
Coloque 5 dientes de ajo y 7 clavos de olor en ½ taza de vinagre de manzana.
Deje reposar 5 días.
Aplique con algodón sobre las várices o sobre los pies con hongos.
Beneficios del ajo y los clavos de olor
Mejoran la circulación sanguínea
Reducen la inflamación de las piernas
Descongestionan las várices y pequeñas venas visibles
Alivian la pesadez y el dolor en las piernas
Previenen la formación de coágulos
Reducen el colesterol malo (LDL)
Fortalecen el corazón
Regulan la presión arterial
