Aunque la combinación pueda parecer inusual, el ajo y la leche son un remedio natural que se ha utilizado durante generaciones para tratar diversas dolencias. Esta preparación combina las propiedades curativas del ajo con los nutrientes esenciales de la leche, creando una bebida eficaz y beneficiosa. En muchas culturas, especialmente en la medicina ayurvédica, esta bebida se recomienda para combatir problemas respiratorios, mejorar la digestión, aliviar el dolor articular e incluso regular los niveles de colesterol y azúcar en sangre.
El ajo es conocido como un antibiótico natural. Su ingrediente activo, la alicina, posee propiedades antibacterianas, antifúngicas y antiinflamatorias. Al combinarse con leche caliente, estos efectos se mitigan, haciendo que su sabor intenso sea más llevadero sin comprometer sus propiedades. Por lo tanto, la leche aporta calcio, vitamina D y proteínas, que fortalecen los huesos y el sistema inmunitario.
Receta básica de pudin de ajo
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