Precalienta el horno a 350 °F (175 °C). Procesa las nueces, los pistachos, la canela y el cardamomo varias veces en un procesador de alimentos hasta que estén picados pero no en polvo.
Derrite la mantequilla en una cacerola a fuego lento. Pincela el interior de un molde para hornear de 9x12x2 pulgadas con mantequilla.
Coloca la masa filo en la encimera y cúbrela con una toalla húmeda. Reemplaza la toalla cada vez que retires una hoja de filo.
Levanta con cuidado una hoja de filo y colócala en el fondo del molde para hornear. Puedes recortar los bordes con tijeras si son demasiado grandes, o simplemente aplanarlos y doblarlos para asegurarlos. Pincela la parte superior con mantequilla. Coloca otra hoja de filo encima. Repite este proceso hasta que tengas 7 hojas en total.
Espolvorea la mitad de las nueces uniformemente sobre la masa filo. Coloca una hoja de pasta filo encima y úntala con mantequilla. Repite este proceso hasta que tengas cuatro hojas en total para esta capa.
Espolvorea con las nueces restantes. Repita el proceso de la mantequilla y la masa filo con siete láminas de esta capa.
Con un cuchillo muy afilado, corte lentamente el baklava en diagonal en trozos del tamaño deseado. Hornee durante 45 minutos. Continúa
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