Control del peso:
Al comer menos cantidad y sentirse satisfecho, se puede lograr un peso más saludable.
Menos molestias digestivas:
La masticación adecuada y la digestión más eficiente reducen la probabilidad de gases, hinchazón, ardor de estómago y otros problemas digestivos.
Disfrute de la comida:
Comer despacio permite saborear y apreciar los alimentos, lo que puede hacer la experiencia más placentera.
Mejor absorción de nutrientes:
Al descomponer los alimentos adecuadamente, el cuerpo puede absorber mejor los nutrientes.
Menor riesgo de atragantamiento:
Masticar bien los alimentos reduce el riesgo de atragantamiento y otros problemas al tragar.
Continúa en la página siguiente
