Cómo usar la cebolla y su cáscara para limpiar la próstata y la vejiga

Antiinflamatoria: reduce la inflamación de la próstata y la vejiga.
Antibacteriana: combate infecciones urinarias.
Antioxidante: gracias a la quercetina, protege las células de la oxidación.
Diurética: aumenta la producción de orina y depura el sistema urinario.
Expectorante y depurativa: limpia vías respiratorias y sangre.
Hipotensora: ayuda a bajar la presión arterial.
Vasodilatadora: mejora la circulación en órganos pélvicos.
Inmunoestimulante: fortalece defensas contra bacterias y virus.
Precauciones
No consumir en exceso si se padece de gastritis severa o úlceras gástricas, pues puede irritar.
En personas con hipotensión, su consumo debe ser moderado.
Puede causar halitosis (mal aliento); se recomienda acompañar con perejil o enjuague bucal.
Si se toman anticoagulantes, consultar con un médico antes de usarlo en exceso, ya que la cebolla fluidifica la sangre.
No sustituye tratamientos médicos, solo funciona como complemento natural.
Conclusión
La cebolla y su cáscara son verdaderos aliados para la salud de la próstata y la vejiga. Sus infusiones, jugos y cataplasmas ofrecen un apoyo natural para hombres que buscan prevenir o tratar problemas urinarios sin recurrir únicamente a medicamentos químicos. Con sus múltiples beneficios antiinflamatorios, antibacterianos y diuréticos, este remedio casero se convierte en una opción sencilla, económica y efectiva.

Incorporar estas recetas en la rutina diaria puede marcar la diferencia en el bienestar masculino y en la prevención de complicaciones de la próstata y la vejiga.