¿Cuánto tiempo puede vivir una mujer sin intimidad? Aquí tienes 10 verdades que debes saber sobre el tema.

  1. Las necesidades no desaparecen, se apaciguan… en la superficie

La necesidad de cercanía, ternura o afecto no desaparece. Simplemente se vuelve más discreta. Podemos enterrarla, olvidarla por un tiempo, pero a menudo acaba resurgiendo en forma de frustración, melancolía o anhelo de algo más.

  1. Menos complicidad, más estrés

Esta profunda conexión humana libera hormonas en nuestro cuerpo que nos tranquilizan, reconfortan y crean una sensación de seguridad. Cuando falta, nuestro cuerpo puede entrar en un estado de tensión con mayor frecuencia: sueño intranquilo, nerviosismo, irritabilidad… todas señales que no debemos ignorar.

  1. Otras áreas están tomando el control… pero no completamente

Algunas mujeres llenan este vacío con una carrera estimulante, proyectos personales o amistades sólidas. ¡Y eso es maravilloso! Pero incluso con una vida plena, puede persistir una carencia que nada más puede compensar: la falta de una conexión íntima y sincera con alguien.

  1. Una soledad que erosiona la autoestima

Sin atención ni afecto, es fácil empezar a dudar de uno mismo. “¿Todavía merezco ser amado? ¿Sigo siendo deseable?”. Estos pensamientos, a veces insidiosos, pueden socavar la confianza en uno mismo si no se reconocen.

  1. Nos adaptamos…pero ¿a qué precio?

Los seres humanos somos resilientes. Sí, una mujer puede adaptarse a vivir sin una conexión emocional intensa. Pero esta adaptación también puede ir acompañada de cierto desapego emocional. Como si aprendiéramos a dejar de esperar para dejar de sufrir. Un modo de “supervivencia” del que no siempre es fácil salir.