Rasgo señalado: Resistencia a admitir fallas o debilidades.
Descripción: Si tu atención se centra primero en un caballo, es posible que seas orgulloso y te cueste reconocer cuando necesitas ayuda o cuando te has equivocado. Eres valiente y amas la libertad, pero cultivar la humildad te permitirá aprender de las situaciones adversas y crecer más rápido.
El delfín – Falta de planificación
Rasgo señalado: Acciones impulsivas y poca anticipación de consecuencias.
Descripción: Ver un delfín antes que a cualquier otro animal indica que eres creativo y sociable, pero también que a veces te dejas llevar por el momento sin sopesar las repercusiones de tus actos. Tu espontaneidad es un don, pero equilibrarla con un poco de estrategia te evitará tropiezos.
El oso – Rigidez y apego a la zona de confort
Rasgo señalado: Aferrarse a lo conocido, resistencia al cambio.
Descripción: Si lo primero que ves es un oso, sueles ser protector y leal, pero también muy reservado. Prefieres la seguridad de lo que ya dominas y te cuesta salir de tu círculo de confianza. Abrirte a experiencias nuevas puede ayudarte a descubrir facetas desconocidas de tu potencial.
El zorro – Escapismo o astucia excesiva
️️ continúa en la página siguiente ️️
Rasgo señalado: Habilidad para eludir responsabilidades o situaciones complicadas.
Descripción: Al identificar antes que nada a un zorro, indicas que eres ingenioso y adaptable, pero que en ocasiones rehúyes el compromiso o las consecuencias de tus actos. Aunque tu ingenio te saca de apuros, reconocer y enfrentar los problemas de manera directa te permitirá crecer y afianzar tus relaciones.
El conejo – Inseguridad
El canguro – Inconstancia
