Los dolores y molestias, así como una sensación general de malestar, suelen estar relacionados con la fatiga. Estos síntomas, combinados con otros signos de deficiencia de vitamina D (bajo estado de ánimo, náuseas frecuentes, etc.), pueden acumularse. Si los experimenta a lo largo del día, quizás sea el momento de revisar sus niveles de vitamina D.
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¿Qué hacer si tiene deficiencia de vitamina D?
En primer lugar, si sospecha que tiene deficiencia de vitamina D, consulte a un profesional de la salud para que le realice un análisis de sangre.
“Referimos rutinariamente a los pacientes cuando alcanzamos los 30 ng/ml”, declaró la endocrinóloga Brittany Henderson a Mind Body Green. “Nuestra población sufre una deficiencia grave de vitamina D, y alcanzar un nivel óptimo de 50 ng/ml tiene un impacto significativo en todos los aspectos de la salud humana”.
Dado que existen pocas fuentes de alimentos que aporten vitamina D, tomar un suplemento sigue siendo la mejor manera de alcanzar y mantener niveles adecuados. Simplemente no lo haga sin consejo médico.
