Aunque los nombres específicos pueden variar según el país, los tipos de fármacos que han generado mayor preocupación incluyen:
Anticonceptivos hormonales (especialmente algunas píldoras de tercera generación)
Algunos antiinflamatorios
Ciertos medicamentos para adelgazar o supresores del apetito
Tratamientos relacionados con el COVID-19 (en casos poco frecuentes)
Entidades como la FDA (Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos), la EMA (Agencia Europea de Medicamentos) y ministerios de salud locales han limitado o suspendido el uso de estos productos. El riesgo se incrementa especialmente en personas con antecedentes como:
Hipertensión arterial
Tabaquismo
Obesidad
