Para obtenerlo de manera natural, incluye en tu dieta alimentos ricos en magnesio como las semillas de calabaza, las almendras, el cacao puro, las espinacas, el aguacate y los granos integrales. También existen suplementos, aunque deben usarse con precaución, ya que un exceso podría generar malestar digestivo o desequilibrar otros minerales.
El magnesio es, en definitiva, un pilar silencioso de la salud. Su equilibrio es la clave para mantener un cuerpo fuerte, una mente tranquila y un corazón estable. Recuperar su presencia en tu rutina diaria es un paso pequeño, pero profundamente transformador para tu bienestar. 🌸
