Los ejercicios oculares sencillos, como cambiar el enfoque con frecuencia o relajar los ojos a intervalos regulares, también pueden ayudar a fortalecer los músculos oculares y a mantener una visión nítida.
En conclusión
Si bien las gafas son una valiosa ayuda a corto plazo, no constituyen una solución sostenible a largo plazo para los problemas de visión. Es fundamental tomar medidas proactivas para proteger y mejorar la salud ocular. Una dieta rica en nutrientes, junto con hábitos de vida saludables y una menor exposición a la luz azul, puede ayudar a preservar la visión durante muchos años.
