A pesar de su temor de que le arrebataran a su “nuevo amigo”, el padre de Milly, al enterarse de la verdad, insistió en que el Cordylus permaneciera confinado. Consciente de los riesgos, advirtió a su hija que no era solo un lagarto inofensivo, sino una criatura que exigía respeto y precaución.
Una aventura llena de suspense
Esta experiencia transformó el inocente amor de Milly por la naturaleza en una aventura enigmática y emocionante. Lo que parecía una simple exploración resultó ser una valiosa lección sobre los misterios y peligros de la vida silvestre. Ahora observaba al lagarto con una mezcla de fascinación y aprensión, consciente de que su “dragón” era tanto una maravilla como un peligro potencial.
La historia de Milly ilustra cómo la naturaleza aún puede sorprendernos y desafiar nuestras certezas. ¿Qué era realmente esta criatura? ¿Era una amenaza o un tesoro desconocido? Este cautivador relato nos recuerda que nuestros descubrimientos, incluso los más inocentes, pueden llevarnos por caminos inexplorados, donde la maravilla a veces se codea con el peligro.
