Cada día sembramos esa planta y cada día obtenemos un poco de sudor que alimenta el alimento que nunca termina.
No busco fama, solo respeto por esta obra que se mantiene en el mundo viva.
Detrás de cada comida hay un agricultor o una agricultora como yo: cansado(a), orgulloso(a) y muchas veces olvidado(a).
Si este es el caso, es seguro decir que la gente está trabajando la tierra… porque están alimentando el futuro.
