Los relojes simbolizan el paso del tiempo. Si un reloj se detiene en el momento de la muerte, algunos creen que es un mal augurio. Incluso si está funcionando, se cree que guarda el alma en el pasado.
Joyas
Las joyas familiares suelen transmitirse de generación en generación. Pero cuando pertenecen a una persona fallecida, algunas culturas creen que pueden transmitir emociones, karma o incluso una presencia espiritual. Si va a conservarlas, se recomienda purificarlas con un ritual o bendición.
Fotos
Las fotos capturan recuerdos, tanto buenos como malos. Si siente que ciertas fotos le entristecen o crean una sensación de pesadez en su hogar, es mejor guardarlas o quemarlas ritualmente para que el alma del difunto se vaya en paz.
Conclusión:
Preservar los recuerdos es importante. Pero a veces es mejor desprenderse de objetos que albergan dolor o energía negativa. Si se pregunta qué hacer con estos objetos, consulte a un guía espiritual o siga las tradiciones familiares.
