¿Por qué salen moretones en la piel sin haberse golpeado?

Hemofilia.
Deficiencias de los factores.
Enfermedad de Glanzmann.
Deficiencia de protrombina.
Enfermedad de Von Willebrand.
Púrpura trombocitopénica idiopática.
Descubre: ¿Por qué los moretones cambian de color?

4. Uso de medicamentos
Medicamentos como la warfarina, la heparina y el dabigatrán están diseñados para prevenir la formación de coágulos. Sin embargo, su consumo disminuye excesivamente la capacidad del cuerpo para coagular, lo que aumenta el riesgo de sangrado. Es un efecto secundario esperable en pacientes que los usan por orden médica.

Por otro lado, la aspirina, el ibuprofeno y los corticoides pueden interferir en la función de coagulación. Además, los últimos son capaces de debilitar los capilares y hacer la piel más delgada, lo que favorece la aparición de moretones.

Finalmente, hay antibióticos y antidepresivos que se asocian a problemas de coagulación, sobre todo, cuando el uso es excesivo o en dosis muy elevadas. Lo mismo sucede con suplementos, como el ginkgo biloba.

5. Carencia de ciertas vitaminas
La vitamina K es esencial para la síntesis de proteínas que regulan la coagulación. Sin suficiente vitamina K, el proceso de coagulación se hace más lento. Los síntomas cuando nos falta este micronutriente son los hematomas recurrentes y el sangrado nasal.

Otra vitamina involucrada es la C. La necesitamos para la salud del tejido conectivo y la integridad de los vasos sanguíneos. Su deficiencia puede debilitar las paredes de los capilares.

6. Bajo recuento de plaquetas
El bajo recuento de plaquetas es conocido como trombocitopenia. La condición puede llevar a la aparición de moretones en la piel sin que haya un golpe evidente.

Las plaquetas se producen en la médula ósea. Si esta no fabrica la cantidad suficiente, debido a anemia aplásica, leucemia o quimioterapia, no se podrá coagular bien.

También puede suceder que las plaquetas sean destruidas más rápidamente de lo que se producen. Por ejemplo, en el contexto de enfermedades autoinmunes, como el lupus. O si el bazo está agrandado (esplenomegalia), pues su mayor tamaño atrapa más plaquetas y reduce el número disponible en el torrente sanguíneo.

7. Alteraciones hormonales
Durante el ciclo menstrual, los niveles de estrógenos y progesterona fluctúan. Estas variaciones pueden afectar a los vasos sanguíneos, haciéndolos más frágiles.

En el embarazo, por otro lado, se producen cambios hormonales significativos que pueden llevar a una disminución en el recuento de plaquetas. Esto se llama trombocitopenia gestacional. Es una situación benigna, pero puede hacer que las embarazadas sean más propensas a desarrollar moretones.

Además, en la menopausia, la disminución de los niveles de estrógenos afecta la elasticidad y firmeza de la piel, así como la integridad de los vasos. Los cambios se asocian a los del envejecimiento.

8. Trastornos de

la circulación
La circulación deficiente puede resultar en un flujo sanguíneo inadecuado hacia diversas partes del cuerpo, especialmente las extremidades. Los factores de riesgo para una mala circulación son los siguientes:

Obesidad.