Un estudio destaca una posible correlación con el desarrollo del autismo.

¿Y qué pasa en los humanos?

Precaución: Este estudio se realizó únicamente en modelos animales, por lo que sería prematuro extraer conclusiones definitivas con respecto a los humanos. Sin embargo, proporciona un punto de partida para futuras investigaciones.

Como explica el investigador principal, John Lukens, el desafío ahora es identificar las características precisas de la microbiota de las mujeres embarazadas que podrían estar asociadas con un mayor riesgo de trastornos del desarrollo neurológico.

¿La idea? Encontrar maneras seguras y eficaces de mantener un  equilibrio intestinal saludable  durante el embarazo, sin afectar el sistema inmunitario, que se mantiene frágil en este momento.

Conclusiones clave

  • La microbiota intestinal materna podría desempeñar un papel crucial en el desarrollo del cerebro del bebé.
  • Una molécula inmune, IL-17a, parece ser un factor clave a monitorear.
  • Se necesitan más investigaciones para comprender mejor este vínculo en los seres humanos.
  • Un estilo de vida saludable, una dieta equilibrada y el seguimiento médico durante el embarazo siguen siendo esenciales.