Con la edad, la próstata se convierte en uno de los temas más delicados para los hombres. No se trata solo de salud, sino también de comodidad, descanso y calidad de vida. Muchos empiezan a notar señales pequeñas pero insistentes: levantarse varias veces en la noche, un chorro de orina más débil, esa sensación de que la vejiga no se vacía del todo, o incluso molestias que antes no existían.
Aunque estos síntomas son comunes, no tienen por qué convertirse en un obstáculo diario. Y aunque la medicina moderna ofrece múltiples tratamientos, la naturaleza también ha acompañado por generaciones a quienes buscan alternativas suaves, seguras y efectivas.
