Ideal para: alcalinizar ligeramente el cuerpo y reforzar defensas.
Ingredientes:
1 vaso de agua tibia
Jugo de medio limón o un limón pequeño
Preparación y uso:
Calienta el agua hasta que esté tibia.
Exprime el limón y añádelo al agua.
Bébela en ayunas, antes de cualquier otro alimento.
Cómo ayuda:
El agua tibia con limón es conocida por favorecer una digestión más suave, estimular el tránsito intestinal y aportar vitamina C, que apoya el sistema inmunológico. Además, muchas personas sienten más energía y menos pesadez al incorporarla a su rutina diaria.
Agua tibia con limón y jengibre
Ideal para: acelerar el metabolismo y aliviar náuseas leves.
Ingredientes:
1 vaso de agua tibia
Jugo de medio limón
3–4 rodajitas finas de jengibre fresco (o ½ cucharadita de jengibre rallado)
Preparación y uso:
Coloca el jengibre en el vaso y agrega el agua tibia.
Deja reposar 3–5 minutos para que el jengibre suelte sus propiedades.
Agrega el jugo de limón y mezcla.
Bébela lentamente, de preferencia por la mañana o entre comidas.
