5 peligros ocultos de viajar después de los 70 que toda persona mayor debería conocer antes de su próximo viaje

Después de los 70, el cuerpo cambia, a veces de forma muy sutil. Nos sentimos en forma, queremos disfrutar de la vida, y eso es perfectamente normal. Pero durante un viaje —nuevos entornos, largas distancias, cambios de ritmo—, ciertas vulnerabilidades pueden aparecer inesperadamente. Los especialistas en bienestar para personas mayores nos recuerdan que muchas molestias están relacionadas con situaciones aparentemente insignificantes: estar sentado demasiado tiempo, olvidarse de beber, sobreestimar las propias capacidades, un cambio repentino de clima… nada excepcional, pero suficiente para alterar el cuerpo.

Afortunadamente, todo esto se puede prevenir fácilmente con algunos buenos hábitos.

  1. Deshidratación sutil

Esta es una de las trampas más comunes, precisamente por su imprevisibilidad. Con la edad, la sensación de sed se vuelve menos evidente, lo que significa que puedes deshidratarte sin darte cuenta. Al viajar (en avión, con calor o durante largas caminatas), esto puede provocar fatiga, mareos o sensación de debilidad.

¿Cómo podemos evitarlo?

  • Mantenga una pequeña botella de agua a mano.
  • Bebe regularmente, incluso si no tienes sed.
  • Opte por bebidas refrescantes.
  • En viajes largos, tome algunos sorbos cada hora