Después de los 70, el cuerpo cambia, a veces de forma muy sutil. Nos sentimos en forma, queremos disfrutar de la vida, y eso es perfectamente normal. Pero durante un viaje —nuevos entornos, largas distancias, cambios de ritmo—, ciertas vulnerabilidades pueden aparecer inesperadamente. Los especialistas en bienestar para personas mayores nos recuerdan que muchas molestias están relacionadas con situaciones aparentemente insignificantes: estar sentado demasiado tiempo, olvidarse de beber, sobreestimar las propias capacidades, un cambio repentino de clima… nada excepcional, pero suficiente para alterar el cuerpo.
Afortunadamente, todo esto se puede prevenir fácilmente con algunos buenos hábitos.
Deshidratación sutil

¿Cómo podemos evitarlo?
- Mantenga una pequeña botella de agua a mano.
- Bebe regularmente, incluso si no tienes sed.
- Opte por bebidas refrescantes.
- En viajes largos, tome algunos sorbos cada hora
