¿Alguna vez te ha arrancado del sueño un calambre tan fuerte que hasta se te escapa una lágrima? Estiras la pierna como puedes, te levantas cojeando y tardas minutos (que parecen horas) en volver a relajarte. Al día siguiente caminas tieso, con miedo a que vuelva a pasar esta misma noche. Si ya pasaste los 55, probablemente esta escena te suena demasiado familiar.
Miles de personas mayores en México la viven casi todas las noches… y la mayoría piensa que “es normal por la edad”. Pero hay una causa silenciosa que muy pocos médicos mencionan de entrada: la falta de magnesio. Y lo más esperanzador es que empezar puedes a mejorarlo con alimentos ricos, deliciosos y súper accesibles. Quédate hasta el final, porque el alimento #1 es tan potente (y tan barato) que muchos lectores me han escrito diciendo que notaron alivio en menos de una semana.
