A continuación, le mostramos los cuatro alimentos más poderosos que debe incluir en su cena o en su merienda nocturna para proteger su cuerpo, dormir mejor y despertar con más energía y vitalidad.
1. Huevo cocido: proteína de alto valor biológico
El huevo es una fuente completa de proteínas, rico en aminoácidos esenciales que el cuerpo necesita para reparar y construir tejido muscular. Consumir un huevo cocido antes de acostarse ayuda a mantener los niveles de proteína disponibles durante la noche, favoreciendo la regeneración celular y la conservación de la masa muscular.
