Cuando un familiar muere, nunca tires estas cuatro cosas después del funeral
En la vorágine del duelo, podríamos sentirnos tentados a dejarlo todo, a tirarlo todo. Pero estos documentos suelen ser los testimonios más íntimos de cuánto nos amaron, nos animaron o simplemente pensaron en nosotros. Guárdalos en un baúl de recuerdos, incluso si no estás listo para releerlos de inmediato.
Su voz: un recuerdo conmovedor
Con nuestros celulares, ahora podemos guardar grabaciones de voz igual que guardamos fotos. Un simple “Llámame cuando puedas” o “Te mando un beso enorme” puede, con el tiempo, convertirse en un recuerdo de gran valor emocional.
Estas grabaciones contienen mucho más que un mensaje: está su entonación, su risa, su respiración… tantos detalles que dan vida a su presencia. Así que, antes de borrar un mensaje de voz instintivamente, guárdalo en algún lugar, aunque no lo escuches a menudo.
Objetos cotidianos que llevaban la marca
Una taza desportillada que todavía se usa para el café de la mañana, un pañuelo que aún conserva su aroma, un reloj antiguo que ya no funciona pero que usaban todos los días… Estos objetos tienen el poder de desencadenar instantáneamente un recuerdo específico.
