La picazón en los pies, a veces intensa y sin sarpullido visible, puede ser un signo de exceso de bilis en el cuerpo. Esto ocurre especialmente cuando las vías biliares están obstruidas o deterioradas, como en ciertas enfermedades hepáticas colestásicas.
Si esta picazón se presenta con frecuencia por la noche o sin motivo aparente, es recomendable una revisión rápida.
Hormigueo, entumecimiento… ¿y si es neurológico?
