Notarás una sensación de ligero tirantez a medida que la clara se seca; es normal, pero si sientes molestia o ardor, retira de inmediato.
Retirar la mascarilla
Enjuaga con agua tibia, realizando movimientos suaves circulares con las yemas de los dedos.
Asegúrate de eliminar por completo cualquier resto de mezcla, en especial en las comisuras de la nariz y cerca del mentón.
Hidratación final
Seca el rostro con una toalla suave y aplica tu crema hidratante habitual.
Si es de día, termina con protector solar, indispensable para cuidar la piel y evitar que se marquen más las líneas y manchas.
Frecuencia de uso y resultados esperados
Puedes usar esta mascarilla 1 vez por semana como máximo. Por llevar bicarbonato y clara de huevo, no es recomendable usarla a diario.
El efecto “difuminar arrugas” es más bien temporal: la piel se ve un poco más tersa y lisa por la ligera tensión y la textura suave que deja la maicena y la miel.
Con el uso constante, algunas personas notan el rostro más luminoso y con aspecto menos cansado, pero no reemplaza tratamientos profesionales ni cambia la estructura de la piel.
Precauciones importantes
No utilizar en piel muy sensible, con rosácea activa, eczema, acné inflamado o heridas abiertas.
