5. Romero
Aplicado en aceite o infusión, mejora la circulación y ayuda a calmar el dolor articular.
Remedios caseros y consejos para aliviar el dolor
Además de las plantas medicinales, algunos cambios simples pueden marcar la diferencia:
Compresas calientes o frías: el calor relaja los músculos y reduce la rigidez, mientras que el frío ayuda a bajar la inflamación.
Baños con sales de Epsom: el magnesio de estas sales alivia el dolor y la tensión muscular.
Masajes con aceites esenciales: como aceite de romero, eucalipto o lavanda, que reducen la inflamación y relajan las articulaciones.
Ejercicio moderado: caminar, nadar o practicar yoga mantiene las articulaciones activas sin sobrecargarlas.
Alimentación antiinflamatoria: rica en frutas, verduras, pescado azul, aceite de oliva y semillas. Se recomienda reducir el consumo de azúcares y ultraprocesados.
Receta casera: Infusión de cúrcuma y jengibre
Este remedio natural combina dos de los antiinflamatorios más poderosos de la naturaleza: la cúrcuma y el jengibre. Ideal para aliviar dolores articulares y mejorar la movilidad.
